Hemos querido hacer este artículo debido a que hemos notado que un gran número de personas tienen problemas para reconocer las diferencias que hay entre una Sociedad Anónima y una Sociedad Limitada.
Lo cierto es que es bastante frecuente tener varias dudas al respecto, ya que ambas formas jurídicas comparten una serie de aspectos y ambas son bastante conocidas y populares.
En España es muy común que los emprendedores que han comenzado su actividad como autónomos terminen formando una Sociedad Mercantil. La gran mayoría de personas optan por formar una Sociedad Limitada, aunque en cualquier caso creemos que lo mejor que puedes hacer antes de tomar esta decisión es tener en cuenta las dos opciones entre las que puedes elegir.
En esta ocasión nos vamos a encargar de analizar con más detalle las diferencias que hay entre una Sociedad Limitada y una Sociedad Anónima.
¿Qué es una Sociedad Anónima?
- La Sociedad Anónima (S.A.) es una forma de organización capitalista que suele ser utilizada por las grandes empresas.
- Es una forma de organización que destaca por dividir el capital de la sociedad mercantil en acciones, de forma que los socios se hacen responsables de su parte correspondiente. De esta forma, las empresas juntan cantidades de capital muy grandes al verse beneficiados por el riesgo financiera y por las contribuciones que hacen los accionistas.
- Asimismo, otro aspecto importante que debemos de tener en cuenta es que tiene una estructura orgánica personal. Esto significa que una Sociedad Anónima tiene la capacidad de actuar igual que una persona jurídica, por lo que puede ser la titular de derechos o bienes, así como contratar a personas físicas. Aunque necesita tener un administrador o una administración que se encargue de representarle.
¿En qué consiste una Sociedad Limitada?
- Las Sociedades Limitadas (S.L.) son un tipo de sociedad que tiene carácter mercantil, siendo la opción más utilizada por pequeñas empresas que se dedican a actividades comerciales.
- En este caso, la responsabilidad frente a terceros está limitada por la capital que cada uno de los socios haya aportado.
- Cuando se tienen deudas, no se responde con el patrimonio personal de cada uno de los socios.
- Las participaciones de los socios no son equivalentes a las acciones, ya que éstas no tienen ningún valor y tampoco pueden ser representadas por medio de anotaciones en cuenta o títulos.
¿Cuáles son las principales diferencias entre una Sociedad Anónima y una Sociedad Limitada?
Tal y como antes mencionamos, ambas son sociedades mercantiles que comparten las mismas obligaciones con respeto al Plan General Contable (las dos tributan Impuestos de Sociedades), pero lo cierto es que tienen algunas diferencias bastante importantes.
Por eso, tenemos que analizar más detenidamente cada una de sus características, de forma que puedas determinar cuál es el tipo de sociedad que se adapta mejor al proyecto que estás comenzando.
¿Qué diferencias hay en el número de socios?
- Las Sociedades Limitadas pueden estar constituidas por un solo socio, lo que es igual de válido cuando se trata de una persona física o jurídica. Cuando una S.L. tiene un solo socio es llamada Sociedad Unipersonal.
- Por otro lado, a diferencia de lo que muchas personas piensan, las Sociedades Anónimas se pueden constituir por un solo socio, pasando a llamarse unipersonal. Sin embargo, se debe de tener en cuenta que se trata de una fórmula societaria que está pensada para tener un mayor número de socios, de la misma forma que la Sociedad Limitada se adapta mejor a las empresas que tienen pocos miembros.
¿Qué diferencias hay según el tipo de actividad empresarial?
Es importante tener en cuenta que actualmente existen una gran cantidad de negocios en los que se desarrollan actividades empresariales que fácilmente pueden ajustarse a ambas figuras fiscales.
- Mientras que una Sociedad Limitada tiene la opción de ejercer un mayor número de actividades, algunos sectores están limitados para las Sociedades Anónimas.
- Esto ocurre en operaciones o actividades del tipo bancario o en las gestoras de seguros o fondos de pensiones.
Diferencias en el capital mínimo entre una S.A. y una S.L.
- Las Sociedades Anónimas tienen un capital mínimo de 60.000€ que se divide en acciones. Se trata de una constitución en la que se puede crear una fundación simultánea, en la que se desembolsan todas las acciones de una forma escalonada.
- Las Sociedades Limitadas tienen un capital mínimo de 3.000€, el cual se divide en participaciones que es desembolsando íntegramente en su creación. En este tipo de aportaciones no hay un límite de capital para los socios.
Diferencias al constituir la Sociedad
- Las Sociedades Limitadas, al solicitar un capital mucho menor para su constitución, tienen un proceso mucho más asequible y se exige menos papeleo.
- Las Sociedades Anónimas tienen que pasar por un escenario más complicado. Su proceso consta de dos procedimientos para los que será necesario contratar a un experto independiente. Se tiene que tramitar una Escritura Pública y una Inscripción en el Registro Mercantil.
¿Qué diferencias hay en las acciones y participaciones entre una S.L. y una S.A.?
- Las Sociedades Limitadas dividen su capital en participaciones sociales que funcionan por medio de una transmisión restringida al conocimiento de los demás socios. Esto quiere decir que la transmisión se puede hacer por los socios entre sí o con terceros, siempre y cuando todos los demás socios tengan conocimiento al respecto. Las transmisiones de participaciones se tienen que hacer por medio de un documento público ante un notario y con una inscripción posterior en el Registro Mercantil.
- Por otro lado, en el caso de las Sociedades Anónimas, éstas tienen más libertad de entrada de socios. Como ya hemos mencionado anteriormente, el capital se divide en acciones que se pueden vender muy fácilmente, facilitando el hecho de que haya nuevos inversores en la sociedad.
¿Cuál es la mejor opción para ti?
A lo largo de este artículo hemos repasado las distintas características de cada una de estas sociedades mercantiles, así como las diferencias que hay entre una y otro. Ahora ya debes saber cuál es la que se ajusta mejor al tipo de empresa que estás empezando.
Si estás empezando un proyecto empresarial realmente ambicioso, entonces puede ser que la Sociedad Anónima sea la mejor opción para ti. Si tu negocio no será tan grande y deseas una mayor sencillez burocrática, entonces es muy probable que la Sociedad Limitada sea la mejor opción para ti, ajustándose mejor a tus necesidades.
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